Una operación de las autoridades dominicanas logró interceptar un impresionante cargamento de cocaína líquida que se encontraba camuflado dentro de un contenedor en tránsito por el país. La acción coordinada se llevó a cabo en el Puerto Multimodal Caucedo, donde se decomisaron aproximadamente 1,100 galones de la sustancia ilícita, la cual estaba hábilmente disfrazada para evadir los controles de seguridad. Este decomiso representa uno de los golpes más significativos contra el narcotráfico en la región durante los últimos meses.

El trabajo de inteligencia y la cooperación entre distintas agencias fueron clave para el éxito de esta misión. La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) encabezó las acciones, contando con el apoyo esencial de miembros del Cuerpo Especializado de Seguridad Portuaria y de agencias de inteligencia del estado. Todo el proceso fue supervisado y coordinado por fiscales del Ministerio Público, garantizando la legalidad y rigurosidad del procedimiento.

El operativo en el Puerto Multimodal Caucedo

El despliegue de los agentes se produjo tras recibir información confidencial sobre un contenedor sospechoso. Al realizar una inspección más detallada en una de las terminales del Puerto Multimodal Caucedo, ubicado en el municipio de Boca Chica, los oficiales descubrieron la carga ilegal. El método utilizado por los criminales fue sofisticado, ya que la droga líquida estaba contenida en 44 tanques plásticos que simulaban ser un envío de fertilizante orgánico.

Este hallazgo pone de manifiesto la constante evolución de las tácticas empleadas por las redes de narcotráfico para intentar mover sus mercancías a través de rutas internacionales. La pericia de los agentes y el uso de tecnología avanzada permitieron detectar la irregularidad en el supuesto fertilizante, que ahora está bajo custodia y análisis.

Una ruta internacional de trasiego

Las investigaciones preliminares han arrojado luz sobre el itinerario del contenedor. Según los manifiestos de envío, la carga se originó en un puerto de Suramérica y estaba en tránsito por la República Dominicana. El destino final de este millonario cargamento de cocaína líquida era la ciudad de Rotterdam, en los Países Bajos, uno de los puertos más grandes y concurridos de Europa.

Este tipo de operaciones de trasiego confirma el papel estratégico que tiene el Caribe para las rutas del narcotráfico que buscan abastecer los mercados de alto consumo en Europa y Norteamérica. Las autoridades dominicanas continúan fortaleciendo los controles en puertos y aeropuertos para cerrar el paso a estas estructuras criminales transnacionales.

La investigación sigue abierta

Tras el decomiso, el Ministerio Público y la DNCD han profundizado las investigaciones para identificar y procesar a todos los implicados en esta red. Se están realizando las diligencias correspondientes para determinar quiénes son los responsables tanto en el punto de origen como quienes facilitarían su llegada al destino final.

La sustancia confiscada fue enviada de inmediato al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF). Allí, los peritos realizarán los análisis químicos para confirmar la pureza y composición exacta del compuesto, un paso necesario para el expediente judicial. Mientras tanto, las autoridades se mantienen en estado de alerta, reforzando la vigilancia en todos los puntos fronterizos del país para prevenir actividades ilícitas y garantizar la seguridad nacional.

Fuente: Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) de la República Dominicana.