El robo de motocicletas en Santiago ha recibido un duro golpe. La Policía Nacional, a través de su Dirección de Investigaciones Criminales (DICRIM), ha desarticulado una peligrosa organización criminal que se dedicaba a este delito y al posterior tráfico de sus partes.

En una operación exitosa, se logró la captura de tres presuntos miembros, incluyendo al señalado cabecilla de la banda, lo que representa un importante avance para la seguridad en la Ciudad Corazón.

La acción policial fue el resultado de un meticuloso trabajo de inteligencia e investigación que permitió identificar y localizar a los responsables que mantenían en zozobra a los propietarios de vehículos de dos ruedas en diversas zonas. Según la información oficial, los agentes del DICRIM lograron establecer el modo en que operaba el grupo, desvelando una estructura bien definida para cometer los actos ilícitos y lucrarse con ellos. Este operativo responde a las constantes denuncias de ciudadanos afectados por la sustracción de sus medios de transporte.

La Identidad de los Detenidos y el Cerebro de la Operación

Los apresados durante la intervención fueron identificados por las autoridades. El presunto líder de la red es Frailyn Almonte Almonte, mejor conocido por el alias de "El Vico", quien según el informe policial era la persona encargada de coordinar las actividades delictivas del grupo. Junto a él, fueron detenidos sus dos presuntos cómplices, Joan Manuel Ventura, alias "El Menor", y Luis Ángel Almonte.

La captura de "El Vico" es especialmente significativa, ya que se considera que con su arresto se corta la cabeza de una de las redes más activas en el robo de motocicletas en Santiago. La labor de la policía se centró en seguir el rastro dejado por los robos recientes para poder conectar los puntos y llegar hasta los principales sospechosos, culminando con su detención y el inicio del proceso judicial correspondiente para que respondan por sus hechos.

El Modus Operandi de la Red Criminal

Una vez que las motocicletas eran robadas de las calles, la banda las ocultaba para desarmarlas por completo. Su objetivo no era revender los vehículos enteros, sino convertirlos en un rentable negocio a través de una red de tráfico de piezas. Esta práctica no solo dificulta la recuperación y el rastreo de las unidades sustraídas, sino que también alimenta un mercado negro que perjudica a talleres y vendedores legítimos, afectando a numerosos propietarios en la región.

El desmantelamiento de las motocicletas se realizaba en lugares ocultos para luego distribuir las piezas entre compradores que, en muchas ocasiones, desconocen el origen ilícito de las mismas. La información fue confirmada en un comunicado oficial emitido por la Policía Nacional de la República Dominicana, detallando que la investigación se llevó a cabo con precisión para identificar y capturar a todos los implicados en esta cadena delictiva.

La Evidencia Recuperada y el Siguiente Paso

Durante el operativo, las autoridades lograron recuperar dos motocicletas que habían sido reportadas como robadas. Se trata de una motocicleta marca Tauro, modelo CG-250, de color negro, y otra marca Gato, modelo CG-200, de color rojo. Estos vehículos son parte de la evidencia material que será presentada en contra de los detenidos.

Tanto los tres hombres apresados como las motocicletas recuperadas han sido puestos a disposición del Ministerio Público de Santiago.

Será esta institución la encargada de continuar con el proceso legal, formalizar las acusaciones y solicitar las medidas de coerción correspondientes ante un juez. La comunidad espera que este golpe certero contribuya a disminuir la incidencia de este tipo de delitos en la ciudad.