

El cobro a motoristas en Santo Domingo Este ha generado un amplio debate y ahora el alcalde del municipio, Dío Astacio, sale al frente para ofrecer una justificación detallada.
La medida establece una tarifa única de RD$1,300 para cada conductor de motocicleta, una acción que según la alcaldía busca poner orden y aumentar la seguridad en una de las demarcaciones más pobladas del país. Lejos de ser un simple impuesto, Astacio asegura que los fondos recaudados tienen un destino específico y directo para el beneficio de los propios motoristas y de la ciudadanía en general.
La administración de Santo Domingo Este sostiene que la tarifa no es arbitraria. Según declaraciones del alcalde Dío Astacio, reporta el portal Proceso.com.do, el dinero será invertido en un completo plan de regularización e identificación. El objetivo principal es crear una base de datos confiable y un sistema de registro que permita saber quiénes son las personas que se dedican al motoconcho y a otros servicios de mensajería en el municipio. Esta organización, afirma el edil, es un paso necesario para reducir los actos delictivos que a menudo involucran a personas que utilizan motocicletas para cometer fechorías y luego se esconden entre los trabajadores honestos.
¿Qué Recibirán los Motoristas a Cambio del Pago?
El plan de la alcaldía detalla que cada motorista que realice el pago de los RD$1,300 recibirá un kit de identificación. Este paquete incluye un chaleco con un código numérico único y un carnet con un código QR. Al escanear este código, las autoridades y los ciudadanos podrán acceder a la información básica del conductor, verificando así su identidad y confirmando que está debidamente registrado en el sistema municipal. Además del kit, el alcalde mencionó que parte de los fondos se destinarán a programas de capacitación y formación para los conductores, con el fin de mejorar el servicio y la seguridad vial.
La alcaldía de Santo Domingo Este tasa a los motoristas como parte de una estrategia más amplia de seguridad ciudadana. La identificación individual de cada conductor dificulta el anonimato que utilizan los delincuentes. Dío Astacio explicó que tener a todos los motoristas debidamente identificados y en una base de datos centralizada permitirá a los cuerpos de seguridad actuar con mayor rapidez y eficacia ante cualquier incidente. La medida busca devolver la tranquilidad a los barrios, donde los residentes a menudo desconfían de los motoristas por temor a ser víctimas de un atraco.
Con este sistema, se pretende separar a los trabajadores honrados de aquellos que usan una motocicleta como fachada para actividades ilícitas.
El proceso de registro es una respuesta directa a una problemática de seguridad que afecta a miles de personas en el municipio. La implementación de esta tarifa y el consecuente programa de identificación buscan transformar la percepción del servicio de motoconcho, convirtiéndolo en una actividad más segura y organizada tanto para quienes la ejercen como para los usuarios que dependen de este popular medio de transporte en su día a día.
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