

El apagón general en República Dominicana ocurrido este martes desató una ola de críticas, siendo la más notable la del expresidente Leonel Fernández. El líder de la Fuerza del Pueblo (FP) no tardó en señalar directamente a la administración actual. Fernández calificó la situación como una muestra clara de la ineficiencia en la gestión del Partido Revolucionario Moderno (PRM), desatando un debate político inmediato sobre la capacidad de respuesta del sistema eléctrico nacional. La población, mientras tanto, sufrió las consecuencias directas de la interrupción.
La fuerte crítica de Fernández
El exmandatario, quien ha dirigido el país en tres ocasiones, utilizó sus plataformas digitales para expresar su descontento. Según lo publicado en su cuenta de X (anteriormente conocida como Twitter), Leonel Fernández critica el gobierno y calificó como "justificada" la indignación que sintieron los ciudadanos. Para Fernández, el manejo de la crisis energética por parte del gobierno es deficiente y la magnitud del fallo evidencia una falta de previsión y mantenimiento adecuados en el sector.
"La indignación del pueblo está más que justificada", escribió el líder de la FP. Continuó su mensaje con dureza: "La ineficiencia del gobierno del PRM no podría ser mayor". Esta declaración establece una postura firme de oposición frente a la respuesta oficial ante el colapso energético. Fernández busca posicionar este evento como un síntoma de problemas más profundos en la administración actual.
El término "descuido incalificable" fue utilizado por el exmandatario para describir la situación. Con esto, Leonel Fernández critica el gobierno no solo por el fallo técnico, sino por la aparente falta de capacidad para gestionar los servicios básicos del país. La falla eléctrica se convierte así en un argumento político de peso en el escenario nacional, en un momento en que la estabilidad del servicio eléctrico es una demanda constante de la ciudadanía y el sector productivo.
Las consecuencias del apagón en la vida diaria
Los efectos de la interrupción eléctrica se sintieron de inmediato en la capital y diversas zonas del país. Uno de los puntos más críticos fue la paralización total del Metro de Santo Domingo. Este sistema de transporte, vital para miles de personas que se trasladan diariamente a sus lugares de trabajo y estudio, dejó de operar. Esto obligó a los usuarios a buscar alternativas de transporte en medio de la confusión, generando aglomeraciones y retrasos significativos.
Pero los problemas no se limitaron al transporte masivo. El apagón general en República Dominicana afectó áreas sensibles como los hospitales, que tuvieron que recurrir a plantas de emergencia para mantener operativos los equipos vitales. Asimismo, las escuelas vieron interrumpidas sus labores, afectando la jornada educativa. El expresidente Fernández mencionó específicamente estos puntos, señalando que "hospitales y escuelas permanecen en sombras", pintando un cuadro de alta vulnerabilidad.
El tránsito vehicular convertido en un caos
Quizás la imagen más evidente del colapso fue el tránsito vehicular en las principales ciudades. Al quedar fuera de servicio los semáforos, las principales avenidas y calles se convirtieron en un verdadero caos. Conductores y peatones enfrentaron una situación complicada por la falta de señalización. Fernández describió el escenario de forma contundente: "El tránsito, con los semáforos inoperantes, es un caos". La falta de energía complicó la movilidad urbana durante horas, requiriendo la intervención de agentes de tránsito en puntos críticos.
Respuesta de las autoridades
Frente a la crisis y las crecientes críticas, las entidades responsables comenzaron a movilizarse. La Empresa de Transmisión Eléctrica Dominicana (ETED) emitió comunicaciones asegurando que su personal técnico estaba trabajando activamente. El objetivo principal era identificar el origen de la falla sistémica y restablecer el servicio eléctrico en el menor tiempo posible para mitigar las afectaciones.
El Ministerio de Energía y Minas también se pronunció en la misma línea. Informaron que se estaban realizando todas las labores necesarias para normalizar la situación energética del país. Sin embargo, al momento de las declaraciones de Fernández, todavía no se había ofrecido al país un informe definitivo que explicara las causas exactas que provocaron el apagón generalizado.
La situación dejó a gran parte de la población a la espera de soluciones y respuestas claras. Mientras los técnicos trabajan en la restauración del servicio, la tormenta política generada por las acusaciones de ineficiencia por parte de figuras como Leonel Fernández apenas comienza. Los ciudadanos esperan que se tomen las medidas correctivas necesarias para evitar que un evento de esta magnitud vuelva a repetirse y afecte la cotidianidad del país.
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